Elegir un aparato de aire acondicionado para una casa, o una nevera doméstica, es algo que está casi al alcance de cualquiera y que se puede realizar con un mínimo de asesoramiento. Pero, ¿qué ocurre si lo necesitamos para una fábrica o para un establecimiento hotelero? En estos casos, saber cómo elegir un equipo de refrigeración industrial puede suponer una diferencia sustancial en el rendimiento de un negocio. Veamos que hay que tener en cuenta para una elección correcta.
Qué es un equipo de refrigeración industrial
Los equipos de refrigeración industrial pueden definirse como aquellas máquinas que son capaces de disminuir la temperatura de un fluido debido a un intercambio calorífico producido por el uso de un líquido refrigerante. Pueden estar destinados al enfriamiento de alimentos, bebidas u otros productos, o a la climatización de espacios.
Su principio de funcionamiento es la eliminación del calor mediante la transmitancia que se produce cuando se ponen dos cuerpos juntos a diferentes temperaturas. Para que esto pueda ser posible, es necesario que estos equipos dispongan de un intercambiador de calor y una unidad de refrigeración.
Si queremos saber cómo elegir un equipo de refrigeración industrial, antes deberemos conocer qué sistemas podemos encontrarnos. Esta es su clasificación:
- Sistemas directos o indirectos: vendrán en función de la cantidad de intercambiadores de calor que posean, en los directos solo habrá uno, mientras que, en los indirectos será necesario que al menos haya dos.
- Sistemas abiertos o cerrados: dependerán de dónde contienen el refrigerante. En los abiertos, este estará en contacto con el medio, mientras que, en los cerrados estará dentro de un circuito o conjunto de tuberías hermético, es el caso del aire acondicionado industrial convencional.
Tipos de equipos de refrigeración industrial
Los diferentes tipos de refrigeración industrial que podemos encontrar en el mercado vienen diferenciados en función del sistema de enfriamiento que empleen. Así, podemos clasificarlos del siguiente modo:
- Refrigeración líquida: el fluido más utilizado es el agua. El nombre comercial que se emplea en estos equipos es el de watercooling. Tienen la característica de poder transmitir el calor a mayores distancias y de una forma muy efectiva.
- Refrigeración por aire: es el más conocido, ya que es el aparato de climatización convencional que podemos encontrar en cualquier lado. Para su funcionamiento es necesario que haya un intercambio calorífico entre dos aires con diferente temperatura.
- Refrigeración termoeléctrica: es el más utilizado en la industria. Se basa en la transmitancia térmica originada al poner en contacto 2 metales con diferentes temperaturas. Presentan una gran versatilidad, ya que puede invertirse la polaridad para generar un cambio de efecto.
- Climatizadores evaporativos: es uno de los tipos indicados para la climatización de grandes espacios. El enfriamiento se consigue gracias a unas almohadillas que se encuentran saturadas de agua y provocan la absorción de calor del aire, evaporándose a continuación.
- Refrigeración por criogenia: este sistema de enfriamiento es sumamente eficiente. Se utilizan materiales como el nitrógeno líquido o el hielo seco, los cuales presentan temperaturas muy bajas, -78ºC y -196ºC respectivamente, y al ponerlos en contacto con un procesador consiguen un enfriamiento muy efectivo y rápido.
Cualquiera de los tipos descritos anteriormente son válidos tanto para usarlos en climatización como en máquinas destinadas al enfriamiento de alimentos, bebidas u otros productos. Ahora bien, … ¿Cómo elegir un equipo de refrigeración industrial?
Factores a tener en cuenta para saber cómo elegir un equipo de refrigeración industrial
Conocer cómo elegir un equipo de refrigeración industrial no es una tarea fácil, ya que se deben tener en cuenta numerosos aspectos técnicos y funcionales. A continuación, vamos a analizarlos.
Aspectos técnicos
Todo aparato de refrigeración industrial se compone de 4 elementos necesarios para su funcionamiento. Estos son:
- Compresor: para que el refrigerante sea capaz de desplazarse por cualquier aparato es necesario elevar la presión de evaporación hasta la de condensación. Esta es la función del compresor, y para elegir el adecuado es necesario tener en cuenta su coste, su rendimiento y las capacidades de cada modelo.
- Condensador: es el encargado de recibir el gas refrigerante y cambiarlo a estado líquido. Para elegir el correcto será necesario tener en cuenta diversos factores como su potencia de enfriamiento, tanto de su sistema de compresión como de expansión, al igual que otros factores externos como son los geográficos, de uso y ambientales.
- Válvulas de expansión: tienen la misión de enviar el refrigerante al evaporador. Para elegir las adecuadas deben considerarse aspectos como la presión del evaporador, la descarga del compresor, la potencia frigorífica necesaria o la existencia de variaciones térmicas en el área a utilizar.
- Evaporador: para poder absorber el calor de la estancia, o de los productos a refrigerar, es necesaria la evaporación del líquido refrigerante. Para su elección hay que determinar el tipo de refrigerante a utilizar, así como la dimensión del sistema a emplear.
De acuerdo a todo esto, puede deducirse que, saber cómo elegir un equipo de refrigeración industrial es algo complicado si no se poseen conocimientos técnicos en la materia. Pero, además, para efectuar una elección correcta es necesario conocer más aspectos, y no son otros que las características de la aplicación para la que vamos a utilizar el equipo.
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Para qué vamos a emplearlo y dónde
Es lógico pensar que necesitamos saber la funcionalidad del equipo de refrigeración industrial para elegir el más adecuado. Veamos qué debemos considerar:
- Necesidades de refrigeración: debemos conocer el área a refrigerar y el tipo de edificio donde se instalará, para saber la disponibilidad de la energía disponible y la potencia necesaria de los equipos.
- La operatividad frente a temperaturas extremas: en numerosas industrias, se utilizan equipos que generan mucho calor como hornos y diferentes tipos de motores. Al mismo tiempo, también hay que tener en cuenta las condiciones de ventilación. En estos casos, habrá que seleccionar equipos que sean capaces de funcionar con estos requisitos extremos.
- Resistencia a la corrosión: en la industria de la alimentación o en la de bebidas, son muy frecuentes los lavados continuos de los equipos. Estos pueden provocar corrosión o contaminación en los mismos y una pérdida de rendimiento, o peor aún, su avería.
- Disipación de calor: este factor lo tienen en cuenta los fabricantes para especificar las temperaturas máximas de funcionamiento de sus equipos. Si esto no se respeta, puede ocasionar un deterioro en el rendimiento, en el funcionamiento y en la vida útil de los aparatos.
Como hemos podido observar, saber cómo elegir un equipo de refrigeración es algo complejo si queremos obtener una buena eficiencia y grandes rendimientos en su funcionamiento. Por ello, la mejor recomendación que podemos ofrecerte es que a la hora de elegir un equipo de frío para tu industria o empresa, consultes con un especialista en refrigeración industrial como SERVIAIRE.