Para saber cómo se monitoriza una sala de compresores de aire tenemos que pensar en el Internet de las cosas, algo que permite que las máquinas trabajen “pensando con cerebro propio”, y que nosotros usamos en casa en los enchufes inteligentes, bombillas conectadas, asistentes de voz, frigoríficos con home connect, etc.
En el mundo del aire comprimido hay varios tipos de controles para compresores con los cuales se puede monitorizar y optimizar el proceso de producción en todo momento, ya que el tipo de aire comprimido que se usa en la industria difiere mucho del que nosotros utilizamos en la vida diaria cuando vamos a hinchar una rueda del coche o inflamos un balón de fútbol.
Se usan controles maestros
Los compresores disponen en su gran mayoría de microprocesadores con pantallas individuales para su control, pero estos no nos sirven cuando lo que queremos es controlar de forma inteligente toda una sala con varios compresores y obtener la máxima eficiencia.
En estos casos, lo que se usa en la industria es lo que se denomina control maestro de una sala de compresores, para lo que tienen que estar todas las máquinas conectadas a la misma red.
Imagen cedida por Kaeser Kompressoren
Cada uno de los compresores tiene su funcionamiento comandado por el control maestro, el cual se conecta a la nube, lo que significa que se puede acceder a sus datos en todo momento y desde cualquier lugar, pudiendo visualizarlos en tiempo real desde un dispositivo con acceso a la red, algo que facilita mucho la tarea de los servicios de mantenimiento, que se pueden conectar en remoto para hacer correcciones o para conocer la incidencia que tiene un compresor antes de acudir a una asistencia.
Del mismo modo, un responsable de la fábrica puede vigilar el control de la sala de compresores desde casa o desde cualquier otro lugar, lo que puede venir muy bien cuando hay incidencias que el personal de planta no sabe resolver en ese momento.
Dentro de la sala, el control maestro refleja toda la información del funcionamiento de los equipos en su pantalla en tiempo real. También si se desea, se puede conectar un ordenador a su puerto Ethernet para extraer información o cambiar cualquier parámetro, como hacer una actualización del software de los compresores
Ayudan a bajar el consumo de energía
Los controles maestros no solo sirven para controlar y monitorizar el funcionamiento de los compresores, sino que van mucho más allá y optimizan el rendimiento de la sala en función de la demanda de aire, lo que hace que el consumo de energía baje al mínimo.
También, gracias al software de un controlador maestro se puede ejecutar una auditoría energética del aire comprimido para que el consumo energético siempre sea el menor posible, haciendo el sistema más eficiente y reduciendo la factura de la luz, lo que ahora mismo se ha convertido en un objetivo para todas las empresas.
Se puede hacer mantenimiento predictivo
En una fábrica la parada de un compresor de aire significa una pérdida de dinero. Los controladores maestros no solo ayudan a pagar menos en la factura de la luz, sino que minimizan las pérdidas al facilitar la programación de los mantenimientos evitando algunas reparaciones o previniéndolas.
Usando el big data a través de los datos que recogen los sensores individuales se puede hacer un mantenimiento predictivo y saber que un compresor tiene un problema antes de que el fallo ocurra, pudiendo programar la operación de sustitución de componentes en el mejor momento para perder el menor tiempo y dinero posible.
Un ejemplo de esto sería dejar el mantenimiento de los compresores para esas fechas en las que los pedidos bajan o en las que disminuye el trabajo, como en los meses de vacaciones cuando buena parte de las empresas o están cerradas o bajan su producción al mínimo.
Imagen cedida por Kaeser Kompressoren
En la sala de control se ven gráficas de rendimiento en tiempo real
La productividad o el rendimiento son fundamentales en cualquier proceso de fabricación, ya que si ambos son bajos los costes de fabricación suben y es muy complicado obtener beneficios.
Por eso, una de las respuestas a la pregunta de cómo se monitoriza una sala de compresores de aire es mediante gráficas en tiempo real del rendimiento de los mismos.
El encargado del control de la sala tiene delante de él las gráficas que le dicen cómo están trabajando los compresores en ese momento, una información que permite ver enseguida si hay algún problema, pues en lugar de interpretar datos solo hay que interpretar líneas.
Las pantallas de los controles maestros marcan los estados de servicio de cada compresor con colores distintos, de manera que para saber si un compresor no funciona a veces ni siquiera es necesario mirar estas gráficas, ya que basta con ver de qué color está en la pantalla del control.
Podemos ver avisos de averías
En la monitorización de las salas de compresores de aire, y gracias a los controles maestros, es posible predecir algunas averías, pero a veces las máquinas fallan de repente y sin motivo aparente.
Cuando esto ocurre, la pantalla del control maestro también nos muestra de inmediato el aviso de que hay una avería en alguno de los compresores, indicando por ejemplo una pérdida de potencia o presión repentinas, una bajada del flujo volumétrico, etc. Una variación en cualquier parámetro nos hace ver que algo no va bien. El control maestro actuará avisando de la incidencia y adoptando medidas inmediatas como puede ser el arranque de otro compresor.
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Conocer cómo se monitoriza una sala de compresores de aire es algo necesario para todos aquellos implicados en procesos de fabricación donde el aire comprimido es imprescindible. De este control depende que la fabricación llegue a buen puerto, pues los compresores son máquinas complejas sobre las que conviene estar encima para que funcionen de forma correcta, anticipándonos siempre a un posible fallo.
