Punto de rocío en el Aire Comprimido

Es muy probable que si estás leyendo ahora este artículo es porque en algún momento has encontrado agua en tu instalación de aire comprimido. Entonces, seguro que alguien te habrá dicho que eso es por culpa del punto de rocío y que tienes que poner un secador para eliminar el agua y mejorar el punto de rocío de tu instalación. Pero lo más probable es que no te haya explicado qué demonios es eso del punto de rocío y porqué tú tienes agua en la instalación si lo que comprimes es el aire ambiente, que aparentemente no tiene agua. En este artículo sobre el punto de rocío en el aire comprimido, encontrarás respuesta a todas estas dudas y alguna más que pueda surgirte en el futuro.

Para llegar a comprender lo que es el punto de rocío, el primer concepto que hay que fijar es el de humedad. En el aire atmosférico existe siempre un grado de humedad en forma de vapor de agua, y esa cantidad de vapor de agua tiene un valor límite para cada valor de temperatura. Así, cuanto mayor sea la temperatura, el aire será capaz de acumular más vapor de agua, pero también hay que tener en cuenta que lo normal es que el aire no contenga todo el vapor de agua que es capaz de almacenar a una determinada temperatura ambiente. Conviene del mismo modo indicar que, la cantidad de agua condensada siempre es mayor con temperaturas más bajas y también con presiones más altas.

El Vapor de Agua

La cantidad de vapor agua referida a una determinada cantidad de aire seco es lo que se define como humedad absoluta, que es la cantidad de vapor de agua expresada en kg contenida en un kg de aire seco. Asimismo, la máxima cantidad de vapor de agua que puede caber en una concreta cantidad de aire se define como humedad de saturación. Siendo la relación entre la humedad absoluta y la humedad de saturación lo que definimos como humedad relativa, la cual se expresa en %. Siendo así que, una humedad relativa del 0% nos indica un ambiente de aire totalmente libre de humedad, y una humedad relativa del 100% nos denota un ambiente saturado de humedad. Si en particular, la humedad relativa fuera del 40%, quiere decir que todavía le quedaría un 60% para llegar al valor de saturación.

Para indicar el grado de humedad también se utiliza el concepto de punto de rocío. El punto de rocío determina la temperatura a la cual el aire llega al punto de saturación, convirtiéndose en aire saturado. Es decir, no se producirán condensaciones si la temperatura del aire se mantiene por encima de la temperatura de punto de rocío. Y si se produjera un enfriamiento del aire por debajo de la temperatura de punto de rocío, el vapor de agua contenido en el aire empezaría a condensarse en forma de agua líquida.

Por ejemplo, en un día de tormenta de verano con una temperatura de 40ºC, una humedad relativa del 60% equivale a un punto de rocío de + 30ºC, y la cantidad de vapor existente en el aire es de 30,39 g/m3, que es la máxima cantidad de vapor de agua que puede haber en 1 m3 de aire a presión atmosférica con una temperatura de + 30ºC.

El punto de rocío en el Aire Comprimido

Dentro del concepto de punto de rocío en el aire comprimido hay que diferenciar lo que es el punto de rocío atmosférico del punto de rocío a presión. El punto de rocío atmosférico es la temperatura a la cual el vapor de agua comienza a condensarse en el aire ambiente, es decir, en este caso en la sala de compresores. Y el punto de rocío a presión es la temperatura a la que el vapor de agua empieza a condensarse con una presión superior a la atmosférica, es decir, una vez ya comprimido el aire. Como ejemplo, si consideramos un punto de rocío a presión de + 3ºC, a una presión de trabajo de 7 bar(g), equivale a una presión de rocío atmosférica de – 23ºC.

En la práctica, en una instalación de aire comprimido, desde el momento en el que sale el aire comprimido del compresor se va produciendo un enfriamiento progresivo del aire que provoca la condensación del vapor de agua que se encuentra en el aire aspirado. Por este motivo, en las instalaciones se incluyen secadores frigoríficos o de adsorción que eliminan el vapor de agua del aire comprimido y evitan todos los problemas que genera el agua en los sistemas de aire comprimido.

 

 

Por ejemplo, en una instalación donde la temperatura ambiente es de 20ºC y hay una humedad del 65%, tendremos un punto de rocío atmosférico de + 13ºC, lo que equivale a una cantidad de vapor de agua de 11,2 g/m3. Después de comprimir el aire a 7 bar(g), enfriarlo con el refrigerador posterior, almacenarlo en el depósito y secarlo finalmente con un secador frigorífico, el aire comprimido tendrá un punto de rocío a presión de + 3ºC y un contenido en presión de vapor de agua de 5,95 g/m3. Si se realiza el secado con un secador de adsorción con un punto de rocío a presión de – 40ºC, el contenido en presión de vapor de agua será de 0,117 g/m3.

Si tienes alguna pregunta o necesitas mejorar tu instalación de tratamiento y secado del aire comprimido no dudes en consultarnos. Nuestros técnicos resolverán cualquier problema que tengas.